Si estás valorando empezar un huerto en casa, es muy probable que quieras iniciarte con los rábanos, ya que son muy fáciles de cultivar. Además, requieren poco espacio y pueden cosecharse durante prácticamente todo el año. Si quieres saber cómo cultivar rabanitos, en Amigos de la Jardinería te damos las claves para conseguirlo.

Tipos de rábanos

Dependiendo de la época en la que cultivemos los rábanos, estos presentarán ciertas diferencias. Por ejemplo, en otoño suelen alcanzar un mayor tamaño que en primavera o en verano. Pero, ¿qué otras variedades de rábanos existen?

  • Rabanito: el rábano rojo o rabanito (Raphanus sativus) es el que aprenderemos a cultivar en este artículo. Generalmente presenta una forma ovalada y su piel puede ser roja, morada, blanca o rosácea.
  • Rábano negro: esta variedad de rabanito (Raphanus sativus var. sativus) es muy similar a la anterior, sin embargo, su piel es negra. Es aconsejable retirarla antes de consumir este tipo de rábano, ya que es poco digestible.
  • Rábano blanco: a diferencia de los dos tipos de rábanos anteriores, el «Daikon» o rábano japonés (Raphanus sativus var. Longipinnatus) suele presentar forma alargada y piel blanca.

¿Cómo sembrar rabanitos?

Independientemente de si quieres plantar rabanitos en macetas o en un huerto fijo, debes saber que puedes hacerlo durante prácticamente todo el año. No obstante, en determinadas zonas, se desaconseja sembrar durante los meses más fríos del año. Entonces, ¿cuándo sembrar rabanitos? Lo ideal es hacerlo desde principios de primavera hasta el inicio del otoño, ya que deben disfrutar de una temperatura óptima aproximada de 20ºC.

Si hemos decidido sembrar en macetas, utilizaremos recipientes pequeños y poco profundos. En el suelo, realizaremos la siembra directa en la tierra, con líneas separadas de 20 centímetros. Una vez hayan germinado los rabanitos, eliminaremos algunos brotes para dejar un espacio de 3 cm. entre uno y el siguiente.

¿Qué cuidados necesitan los rabanitos?

Situaremos esta planta de raíz en un lugar soleado, exceptuando en los meses de más calor, cuando prefiere zonas de semisombra. Realizaremos un riego diario moderado, manteniendo en todo momento la tierra ligeramente humedecida, no encharcada. En cualquier caso, evitaremos el uso de compost, especialmente si es fresco, ya que la planta no lo tolera demasiado bien.

¿Cuándo cosechar rabanitos?

Los rabanitos tienen un ciclo especialmente corto, por ello, los cosecharemos de forma muy pronta y los veremos crecer día a día. Así, la cosecha de los rabanitos se realiza a las 3 o 4 semanas. Básicamente debemos arrancar la planta directamente, pudiendo aprovechar la raíz para el consumo, pero también las hojas.

Por su parte, las vainas del rábano pueden abrirse, pues es allí donde contienen las semillas. Podemos añadirlas a nuestra dieta o bien utilizarlas para volver a cultivar rabanitos.

Propiedades de los rabanitos

¡Ahora ya sabes que muy fácil cultivar rabanitos! ¿Cuáles son sus propiedades? Debes saber que apenas contienen calorías y que son una fuente de calcio, hierro, yodo y Vitamina C. Por ello, son unos grandes aliados en quienes busquen un alimento diurético y digestivo.

¿Y sus beneficios? Estos alimentos fortalecen el sistema inmunológico, nos ayudan a cuidar el hígado, el corazón y son ideales para combatir gripes y catarros. También se aconsejan para personas asmáticas y protegen la salud cardiovascular.

¿Cómo cocinar rabanitos y añadirlos a nuestra dieta? Existen muchas recetas con rabanitos que podemos probar, ya hablemos de rabanitos crudos o cocidos. Algunos ejemplos son la ensalada con rabanitos, los rabanitos asados o la pasta con rabanitos. ¡En Internet encontraremos opciones muy variadas para consumirlos!