Plantas y árboles tienen la importante función de atrapar el dióxido de carbono (CO2) y convertirlo en oxígeno. Además, también pueden ayudar a filtrar ciertas sustancias contaminantes que se acumulan en interiores. No obstante, no todas las plantas son igual de efectivas, por ello, en Amigos de la Jardinería compartiremos contigo 5 plantas que purifican el aire según un estudio de la NASA. ¡No te lo pierdas!
¿Por qué debemos purificar el aire?
El aire respirado de las personas provoca la acumulación de dióxido de carbono o CO2 en ambientes interiores, lo que favorece la transmisión de virus y baterias. Pero además, si vivimos cerca de carreteras, fabricas o en ambientes urbanos, es probable que nos sometamos también a las partículas en suspensión PM10 o PM2,5, que afectan directamente a nuestro organismo.
Las plantas son una solución ecológica y efectiva a la hora de mejorar la calidad del aire, por ello, nos hemos fijado en un estudio que la NASA llevó a cabo para determinar cuáles eran las plantas más adecuadas para reducir la contaminación de un ambiente interior. ¡Vamos allá!
1. Espatifilo
Conocida como cuna de Moisés, lirio de la paz o vela del viento el espatifilo, es la planta que más purifica el aire ya que tiene la capacidad de absorber formaldehído, xileno y tolueno. También tiene la capacidad de absorber otros compuestos como la acetona, el benceno y el tricloroetileno, aunque en menor medida.El lirio de la paz, además de purificar el aire de estas sustancias químicas, también es capaz de absorber esporas de moho.
Además el espatifilo no necesita ni mucha luz ni demasiada agua, con lo que disfrutarás de una planta de interior fácil de cuidar y con muchas propiedades beneficiosas. Para más detalles, recuerda que debemos evitar el contacto directo del sol en los meses en que los rayos sean más potentes y mantendremos la tierra húmeda con un suelo bien drenado.
2. Areca
La areca es otra de las plantas que purifican el aire. También es conocida como palmera amarilla o palmera de los frutos de oro, la areca es la segunda del ránking de las plantas purificadoras. Tiene la capacidad de absorber formaldehído, xileno, tolueno y destaca por su alto nivel de absorción de CO2.
La areca puede estar en contacto directo con la luz solar, aunque sus hojas pueden llegar a sufrir daños si éste es demasiado fuerte. Se desarrollará mejor en algún lugar sombreado o semisombreado y necesitará un ambiente con alta humedad, algo podemos conseguir pulverizando sus hojas periódicamente.
3. Sansevieria trifascita
La sansevieria trifascita o lengua de suegra es una de las plantas de interior más resistentes y purificadoras que podemos encontrar: elimina componentes tóxicos que pueden encontrarse en aire como el fomaldehído y el benzeno.
Además de ser una de las mejores plantas para purificar el aire de nuestras casas también es una planta muy resistente a diversas carencias como la falta de luz solar, falta de agua, y otros tipos de abandono que puede sufrir una planta.
Pese a ello, la sansevieria suele vivir y prosperar a pesar de todos estos problemas de dejadez que puede llegar a sufrir, de ahí su fama de planta indestructible.
4. Potos
El poto o potos es una planta de interior que nos ayudará a purificar el aire de la estancia en la que se encuentre, librándonos de sustancias tóxicas como el formaldehído y el monóxido de carbono. Debemos tomar mucha precaución, pues poto es una planta venenosa y los niños o las mascotas no deben ingerir en ningún caso.
El poto requiere mucha luz del sol, pero nunca debe tocarle directamente ya que sus hojas se queman con facilidad. También debemos proporcionarle un riego moderado, ya que es una planta que con demasiada humedad se pudre. Finalmente señalar que deberemos sacar el polvo de las hojas regularmente. Con pocos cuidados y poco tiempo podemos disfrutar de esta planta limpiando el aire de nuestra casa.
5. Cinta
También conocida con el curioso nombre de mala madre, la cinta es una de las mejores plantas a la hora de atrapar las partículas de formalehído que flotan en el aire de nuestra casa. También actúa de este modo contra el benceno, el xileno y el dióxido de carbono.
Por todos los beneficios que nos aporta tener una cinta, los cuidados que le tenemos que dar a cambio son mínimos: necesitará exposición indirecta a la luz del sol y le ofreceremos un riego a la semana en invierno y dos veces a la semana en verano. Recuerda que para evitar problemas con tu planta debes evitar los encharcamientos, por lo que deberás vigilar siempre que estos no se produzcan a la hora de regar.
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